Bridget Riley


Bridget Louise Riley nació en West Norwood, Londres (Inglaterra) en 1931. Su padre, John Fisher Riley, había sido oficial del ejército y al comenzar la Segunda Guerra Mundial fue llamado a filas y Bridget, junto a su madre y su hermana Sally, se mudó a una cabaña en el condado de Cornwall donde se crió.

Asistió a Cheltenham Ladies ‘College, después comenzó sus estudio de arte en el Goldsmiths College, y más tarde en el Royal College of Art. A finales de la década de 1950 le influyó el puntillismo de Georges Seurat y produjo obras interesantes que fueron la base de sus siguientes propuestas.

A principios de la década de los sesenta, comenzó a desarrollar su estilo propio característico dentro del movimiento Op Art. Realizó patrones geométricos estudiando el dinamismo óptico, un efecto que produce desorientación en el ojo en movimiento, trabajó con el contraste entre el blanco y el negro, introduciendo ocasionalmente escalas tonales de gris.

Las obras realizadas durante ese tiempo, fueron pintadas por personas asistentes que la ayudaron. Bridget planeaba meticulosamente el diseño con dibujos preparatorios y técnicas de collage y sus asistentes realizaron los lienzos finales con gran precisión y siempre bajo su supervisión.

Movimiento en cuadrados (1961)

comenzó a investigar con el color en 1967, después de un viaje a Egipto se inspiró en la decoración jeroglífica, la luz de África la hizo prestar atención sobre el colorido y el contraste. En algunas obras de esa época utilizó líneas cromáticas para mostrar un efecto brillante, mientras que en otras recurrió al teselado, investigó sobre nuevos tonos, compuso su «paleta egipcia» y con ella produjo las series “Ka” y “Ra”, en ambas se captura el espíritu, tanto antiguo como moderno, y el paisaje de ese país.

En 1983 regresó a Venecia para estudiar una vez más las pinturas que forman la base del color europeo y hacia finales de la década de 1980, su trabajo experimentó un cambio radical con la introducción de la línea diagonal. Así en la obrab“Delos” de 1983, los tonos azul, turquesa y esmeralda se funden con los anaranjados y amarillos.

Riley también pintó murales temporales para la Tate Modern, el Musée d’Art Moderne de la Ville de Paris y la National Gallery . En el 2014, la Colección de Arte de Caridad del Imperial College Healthcare le encargó un mural permanente de 56 metros para el Hospital St Mary’s, de Londres. Entre 2017 y 2019 realizó una pintura mural para la Fundación Chinati , Marfa, Texas, que es la obra más grande de la artista hasta la fecha.

Bolt of Color (2017-2019)

Vista de instalación, Fundación Chinati, Marfa, Texas

A los 88 años realizó una exposición retrospectiva en la Hayward Gallery de Londres y con sus palabras comentó:

Mi pintura no tiene que servir para nada, como muchos otros cuadros. No tiene que representar algo. Los colores, las líneas, las formas, los espacios, no tienen que tener una doble tarea, por así decirlo.

La importancia de Riley se debe, sobre todo, a su contribución al desarrollo del Op Art. El hecho de haber podido contar con ayudas en la realización de su trabajo, hace hincapié en que, al igual que la mayor parte del arte de finales del siglo XX, el elemento conceptual de su obra llega a ser más importante que la cualidad individual de su ejecución.

https://en.wikipedia.org/wiki/Bridget_Riley

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