Nació en 1889 en Valencia. Fue la hija mayor de Joaquín Sorolla y de Clotilde García del Castillo. Educada en la Institución Libre de Enseñanza, un centro que fomentó siempre la creatividad en el alumnado, y en el que recibió una educación muy diferente a la que recibían otras niñas de su época, que estudiaban en escuelas religiosas femeninas.

Retrato de María Sorolla con vestido rojo. (detalle)

Joaquín Sorolla (1910)

Colección Museo de Bellas Artes de Valencia

Desde muy joven tuvo la influencia de su padre y de sus hermanos, Elena y Joaquín, los tres hijos estudiaron idiomas, viajaron y recibieron una gran formación artística.

María, siempre tuvo una salud muy delicada, por lo que solo pudo dedicarse a la pintura al dejar atrás la tuberculosis que de niña le fue diagnosticada. Así se describe este momento en un documento conservado en el Archivo de Arte valenciano: «Durante su convalecencia en El Pardo, empezó a pintar con nuevos ánimos hasta que un día, al ver un minúsculo apunte, don Joaquín exclamó, con lágrimas en los ojos, que María había visto el color».

A partir de ese instante, apuntes de Valencia, Sagunto y Granada comenzaron a intercalarse en su obra con estudios de flores y paisajes. También hay constancia de un viaje a Estados Unidos con su padre en el que María cosechó varias notas de escenas urbanas.

La chula (1925)

Colección Museo de Bellas Artes de Valencia

Probablemente animada por su padre, en 1916 María participó en la Exposición de la Juventud valenciana, donde también tomó parte su hermana Elena.​

Se casó con Francisco Pons Arnau, que también era pintor y discípulo de Sorolla, Mariano Benlliure realizó en mármol blanco su retrato como regalo de bodas y que a día de hoy es una de las piezas propiedad de la familia que puede verse en el Museo Sorolla de Madrid.

La pareja tuvo un hijo, Francisco Pons-Sorolla, que sería arquitecto, urbanista y Director General de Arquitectura. Desde el nacimiento de su hijo se volcó más en su familia, pero conviene recalcar el valor que tuvo en aquella época por seguir su vocación artística.

En 1926 expuso de nuevo, y lo hizo también con su hermana Elena, en la primera muestra de arte femenino del prestigioso Lyceum Club de Madrid. Las hermanas recibieron una buena crítica y vendieron algunas piezas.​

Jarrón con rosas (s/f)

Exposición «Creadoras olvidadas» (2010)

Sala Municipal iglesia de los Franceses  (Valladolid)

La crítica describió su arte como: «Lienzos coloristas los suyos, percibidos en amplia visión de luces y matices compuestos con facilidad y decidida pincelada, llenos de notas, al mismo tiempo, de sensaciones de graciosa fineza».

Su producción artística no es muy extensa, dado que nunca dio el paso hacia la profesionalización. Su hermana Elena fue una escultora destacada del momento y su hermano Joaquín fue el primer director del Museo Sorolla de 1932 hasta el 1948.​

María falleció el 19 de junio de 1956 y como buena parte de su familia, está enterrada en el cementerio de Valencia.

https://es.wikipedia.org/wiki/Mar%C3%ADa_Sorolla_Garc%C3%ADa