Retrato de María Tomasa Palafox, Duchess of Medina Sidonia (1780-1835)María Tomasa Palafox y Portocarrero, Marquesa de Villafranca y Duquesa de Medina Sidonia nació en Madrid el 7 en 1780 y fue hija de Felipe Antonio Palafox y Croy  y de Mª Francisca de Sales Portocarrero, condesa de Montijo, una de las mujeres más cultas e influyentes de la aristocracia del momento. Además de mantener una de las tertulias intelectuales más importantes de Madrid, fue secretaria durante 18 años de la Junta de Damas de Honor y Mérito, institución fundada en 1775 en el marco de la Real Sociedad Económica Matritense, que se implicó muy activamente en programas de reforma social, entre ellas la educación de las mujeres y la mejora de las condiciones en cárceles femeninas e inclusas.

José Alonso del Rivero Sacades «María Tomasa Palafox, Duchess of Medina Sidonia» (1780-1835)

Colección Museo del Prado

María Tomasa continuó el trabajo de su madre y participó también en las actividades de la Sociedad Matritense, mostrando gran interés por las nuevas ideas pedagógicas y el desarrollo científico.

Asimismo, participó activamente en las primeras formas de asociaciones femeninas en España, de tinte conservador y compuestas por señoras de la aristocracia pero que defendían también ideas ilustradas. Así, por ejemplo, reivindicaban los derechos de las mujeres al margen del discurso de la excelencia, que aceptaba como válida la igualdad sólo para aquellas mujeres que eran consideradas extraordinarias por sus cualidades.

Se casó en Madrid en 1798 con Francisco de Borja Álvarez de Toledo, XII marqués de Villafranca (1763-1821) y tuvieron seis hijos: Francisco, María Teresa, Pedro de Alcántara, María Tomasa y los gemelos José e Ignacio. Un rasgo que revela su carácter excepcional, es el reconocimiento hacia el saber científico, realidad que manifestó durante la larga enfermedad y posterior fallecimiento de su primogénito, acaecido en 1816, permitiendo la realización de su autopsia.

Sagrada Familia en el taller del carpintero (1801)

Copia de Alonso Cano

En la pintura de Francisco de Goya “María Tomasa de Palafox y Portocarrero, marquesa de Villafranca, pintando a su marido”, que se conserva en el Museo del Prado, la vemos pintando el retrato de Francisco de Borja Álvarez de Toledo, en una postura un poco teatral y afectada, pero que respondía a una realidad del momento: algunas mujeres de la aristocracia llevaban a cabo actividades artísticas.

Fue nombrada miembro de honor en 1805 en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Las Academias de carácter artístico, científico o literario no excluían, en principio, a las mujeres, pero en la práctica pocas pudieron incorporarse a ellas. La Academia de San Fernando fue una de las primeras en permitir la incorporación femenina y en 1766 contaba con diez pintoras y a la condesa de Fuentes, como presidenta honoraria.

Frecuentemente se ponían límites a su formación pictórica y no se les permitía asistir a las clases de dibujo al natural de desnudos ni salirse de los temas marcados como “femeninos”: la pintura de flores o paisajes.  A pesar de ello, algunas de esas mujeres artistas fueron reconocidas como “Académicas de mérito”.

Francisco de Goya “María Tomasa de Palafox y Portocarrero, marquesa de Villafranca, pintando a su marido” (1804)

Colección Museo del Prado

En 1811 fundó en Cádiz la Sociedad Patriótica de Señoras de Fernando VII, donde adquirió gran protagonismo. Con una gran actividad social, además de mantener una de las tertulias más importantes de Madrid. Siguiendo la intensa labor de su madre, se preocupó especialmente por la situación de los niños incluseros y de la educación de las niñas, mostrando interés en la recepción del sistema pedagógico lancasteriano, fue presidenta de la Junta de Damas de Honor y Mérito que fue la primera Asociación de Mujeres fundada en España, integrada únicamente por mujeres, y que sigue realizando su labor en la actualidad.

Publicó un Elogio a la reina Isabel de Braganza en 1819 y varias Memorias sobre las tareas de la Junta de Damas en los años en que ejerció la presidencia. En 1830 se le concedió la banda de la Orden de las Damas Nobles de la Reina María Luisa.

Finalmente se volvió a casar en 1824, en Nápoles, con José Álvarez de Toledo. En sus últimos años y con su marido viajó a las posesiones de la familia en Italia para reencontrarse con su hijo, Pedro, heredero del título, estando este último envuelto en desavenencias con el Rey por su apoyo al pretendiente Don Carlos.

La marquesa de Villafranca falleció en la ciudad de Nápoles en 1835, a la edad de cincuenta y cinco años.

https://es.wikipedia.org/wiki/Mar%C3%ADa_Tomasa_Palafox

https://www.museosenfemenino.es/museo_prado/trabajos_de_mujeres/maria-tomasa-de-palafox-y-portocarrero-marquesa-de-villafranca