Nació en Toronto (Canadá) en 1923. Fue hija única de una familia judía rusa que tras la gran depresión económica de los años 30 se trasladó a Nueva York. Su abuelo inmigrante ruso inventó el primer ojo de muñeca móvil en Estados Unidos y fabricó ositos de peluche.
Su padre, Theodore Schapiro, fue un artista especializado en diseño industrial e intelectual que estudiaba en el Beaux-Arts Institute of Design, en Nueva York, cuando nació Miriam, que a los seis años, comenzó a dibujar.
De adolescente, tuvo como profesor a Victor d ‘Amico del Museo de Arte Moderno. Por las tardes asistía a clases para adultos en dibujo de desnudos. En 1943 ingresó en el Hunter College en la ciudad de Nueva York, pero recibió una beca para estudiar en la Universidad de Iowa donde estudió pintura, grabado con Mauricio Lasansky que enseñó a sus alumnos a usar varias técnicas de impresión diferentes y a estudiar el trabajo de los maestros para encontrar soluciones a problemas técnicos.
En la Universidad conoció a Paul Brach, con quien se casó en 1946. Después de graduarse en 1949, Brach logró un trabajo en la Universidad de Misuri como instructor de pintura. En 1951 se mudaron a Nueva York donde frecuentaron a muchos de los artistas de la Escuela de Nueva York. En los primeros trabajos profesionales de Shapiro crea dibujos y pinturas marcadas por la influencia del expresionismo abstracto desarrollado entre 1953 y 1957. A pesar del relativo éxito de su obra comprobó pronto las dificultades y la discriminación que sufrían las mujeres de la época en un territorio controlado y dominado por hombres.
La belleza del verano (1973-1974)
Vivieron en esa ciudad de Nueva York durante las décadas de 1950 y 1960. Miriam y Paul tuvieron un hijo, Peter Brach, en 1955. Antes y después del nacimiento de su hijo Peter, la canadiense luchó por su identidad y su lugar como artista. Los sucesivos estudios de Miriam Schapiro, después de un período de crisis, sus obras se convirtieron en reflejos de los cambios en su vida.
Hacia 1960 la pareja de artistas se mudó a California y es donde Schapiro inicio su activismo feminista con el reto de buscar temáticas y estéticas que representaran la identidad de la mujer y sus roles en la sociedad. Empezó a eliminar la pincelada expresionista abstracta e introdujo una variedad de formas geométricas.
Retrato de Frida Kahlo (1988)
Colección Museo de Arte Universidad de Miami
En 1964 la pareja trabajó en el Tamarind Lithography Workshop. Uno de los mayores puntos de inflexión en su carrera artística fue trabajar en el taller y experimentar con el papel Color-Aid de Josef Albers donde comenzó a hacer varios santuarios y creó sus primeros collages.
Brach creó y dirigió el departamento de arte de la Universidad de California en San Diego y Schapiro impartió clases en la misma Universidad. En esa época comenzó a crear piezas consideradas icónicas en el movimiento feminista, se convirtió en una de las primeras artistas en utilizar software informático en las artes visuales como la obra “OX” de 1967 en la que sobrepone una letra O sobre una letra X, realizadas desde figuras geométricas digitalizadas que recrean los órganos genitales femeninos. El trabajo de Schapiro desde la década de 1970 en adelante consiste principalmente en collages ensamblados con telas, que ella llamó «femmages”.
Madness of love (1987)
Murray Edwards College. University of Cambridge
Womanhouse fue una instalación y un espacio de actuación organizado por Judy Chicago y Miriam Schapiro, cofundadoras del Programa de Arte Feminista del Instituto de Artes de California. Fue la primera exposición pública de arte feminista, Schapiro, como organizadora, también participó con sus estudiantes y artistas de la comunidad local, entre las que se encontraba la paraguaya Faith Wilding.
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