Elizabeth Joy Peyton nació en 1965 en Danbury, Connecticut (Estados Unidos). A los diecinueve años se trasladó a la ciudad de Nueva York, donde estudió en la Escuela de Artes Visuales, de entre 1984 y 1987, graduándose de Bachelor of Fine Arts (BFA).
Las pinturas al óleo y los minuciosos dibujos a lápices de colores de las figuras idealizadas de amigos, personajes históricos y celebridades nos remiten a la estética de las fotografías de moda, pero la composición de los cuadros y el énfasis en la psicología de los modelos muestran una clara influencia de retratistas como Anthony van Dyck, Diego Velázquez, Francisco Goya o Edouard Manet.
Ha realizado una galería integrada por los personajes de las novelas de Gustave Flaubert y Stendhal; por figuras de la política y la realeza, como Napoleón, María Antonieta, Luis II de Baviera, Lady Di, Al Gore y Michelle Obama; por escritores reconocidos, como Óscar Wilde; por músicos populares, como Elvis Presley, John Lennon, Kurt Kobain y Pete Doherty; por actores, como Leonardo DiCaprio y Chloë Sevigny; por artistas plásticos, como Eugéne Delacroix, Georgia O’Keeffe, Frida Kahlo, David Hockney y Matthew Barney; y por amistades desconocidas, como Tony, Craig, Ben, Nick y Spencer.
Elizabeth Peyton, Michelle and Sasha Obama Listening to Barack Obama at the Democratic National Convention August 2008 (2008)
Colección Museo de Nueva York
La pintora no hace distinciones entre celebridades y personajes anónimos; el título de la mayoría de sus obras es el nombre del modelo; esto tiene el efecto de acercar al retratado con el observador del cuadro, consiguiendo una sensación de confianza. La artista confiesa
Para mí no existe una separación entre las personas a las que conozco a través de su música o fotos y alguien a quien conozco personalmente. La manera en que los percibo es muy similar; no hay diferencia entre determinadas cualidades que encuentro inspiradoras en ellos; ambos me dan algo mágico en el mismo nivel.
Las obras se caracterizan por un trabajo detallado en las facciones y los labios carmesí de los hombres y mujeres retratados, lo cual los hace fácilmente reconocibles.
A finales de la década de los noventa, la actitud de los modelos se volvió más introspectiva; ya no posaban en actitud romántica ni tenían un aire de dandy del siglo XIX; ahora Peyton mostraba su psique, a través de la composición y el uso de los colores. En el año 2001 se mudó de Manhattan hacia North Fork, Long Island, Nueva York, e incorporó a sus cuadros los colores y la luz de la costa de la punta norte, de la isla neoyorkina.
Empleó más la pintura basada en modelos y paisajes en vivo, en lugar de recurrir a fotografías, portadas de revistas y recortes de periódicos. En el año 2004, con el alquiler temporal de un estudio en Manhattan, Elizabeth Peyton comenzó a pintar escenas de la vida y de sus propias fotografías, sin dejar de lado los dibujos de fuentes literarias (libros y revistas); en estas obras los colores son más ligeros, aclarados por la luz natural, y las poses de sus modelos se tornaron menos rígidas y más relajadas.
David Bowie (2012)
Mientras que algunas de sus obras toman a los protagonistas de fotografías de revistas y de las cubiertas de los discos, y concentran su mirada en jóvenes ociosos, en los últimos años se ha decantado por pintar y dibujar escenas de la vida o de las fotografías, con un efecto global más vulnerable
Las obras de Elizabeth Peyton se encuentran en las colecciones de importantes museos: Museo de Arte Carnegie, Pittsburgh, Estados Unidos; Centro Pompidou, París, Francia; Cranford Collection, Guernsey, Reino Unido; Museo de Arte de Basilea, Suiza y Museo Whitney de Arte Estadounidense, Nueva York, Estados Unidos
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