Suzanne Van Damme nació en Gante (Bélgica) en 1901. Fue discípula de James Ensor que en su lienzo titulado » Peintres aux Prises «, aparece Suzanne Van Damme -lápiz en mano- y él mismo sentado y mirándola.
Durante un amplio espacio de tiempo Suzanne colaboró estrechamente con varios poetas. Esos poemas le eran dedicados con regularidad, mientras que sus composiciones se convertían en una mezcla de elementos literarios y pictóricos. Su amor por la poesía y sus experimentos en el campo gráfico dieron lugar a una nueva escritura, una especie de alfabeto privado lleno de signos y símbolos, una misteriosa mezcla de caligrafía japonesa y jeroglíficos egipcios en blanco y negro.
Sus dibujos y pinturas se desarrollaron desde entonces en torno a figuras femeninas, en una atmósfera onírica.
Tras varias exposiciones en Bruselas, se traslada a París a principios de los años treinta. La Galerie de Paris (1934) y la Galerie Bernheim (1935) expusieron sus obras. En Montparnasse conoció al pintor, ceramista y poeta italiano Bruno Capacci, con quien se casó. La pareja entabló amistad con artistas franceses como Marcel Duchamp y Jean Cocteau.
Equilibre (1946)
«El padre del surrealismo» André Breton invitó a Capacci y Van Damme a participar en la famosa `Exposition Internationale du Surréalisme´ en la Galería Maeght de París en 1947, junto a famosos contemporáneos como Arp, Calder, Duchamp, Giacometti, Lam, Matta, Miró, Picabia, Man Ray, Tanning entre otros muchos.
Cuando la pareja se trasladó a Florencia en los años 50, Suzanne quedó muy impresionada por la belleza de la Toscana, los colores de la tierra, la arena, los guijarros, el mármol… Empezó a pintar o más bien a » esculpir » formas ondulantes abstractas sobre lienzo.
Durante su larga carrera, Van Damme expuso cinco veces en el Palacio de Bellas Artes de Bruselas y participó en las Bienales de Venecia de 1935, 1954 y 1962 y en la Bienal de Sao Paulo de 1953.
Femme Surréaliste (s/f)
Su último periodo es sin duda el más personal e interesante. Una serie de pequeñas escenas abstractas y figurativas individuales se reúnen sobre lienzo o sobre panel, formando un gran patchwork. La mayor parte de estos criptogramas están pintados en negro, marrón y beige, arrojando un velo de belleza intemporal sobre las señales primitivas y las figuras mitológicas.
Suzanne Van Damme falleció en 1986 en Ixelles (Bélgica) a los 84 años.
En septiembre-octubre de 2015 varias obras surrealistas de Suzanne se pudieron contemplar en la Galería Sotheby’s de Nueva York en la exposición «Cherchez la femme», junto a piezas surrealistas de otras mujeres artistas como Leonor Fini, Meret Oppenheim, Leonora Carrington, Dorothea Tanning, Toyen Dora Maar entre otras.
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