Anna Dorothea Therbusch (nacida Anna Dorothea Lisiewski, en polaco Lisiewska), nació en 1721 Berlín. Perteneció a una familia de artistas, hija de Georg Lisiewski fue un pintor de origen polaco que llegó a Prusia en 1692 como parte del séquito del arquitecto de la corte Johann Friedrich Eosander von Göthe.

Autorretrato (detalle) 1777

Gemäldegalerie (Berlín)

Anna Dorothea, junto a su hermana y a su hermano aprendió a pintar gracias a las enseñanzas de su padre. Los tres hermanos se dedicaron posteriormente a la pintura.

Anna Dorothea se casó con el hostelero de Berlín Ernst Friedrich Therbusch un hombre que le prohibió pintar, tuvo 4 hijos y se vio obligada a ayudar a su marido en el restaurante. Una vez liberada de sus obligaciones familiares, siendo una mujer madura, abandonó su familia para regresar a su arte.

Friederike Luise von Hessen-Darmstadt (Therbusch).jpg

En 1760 obtuvo mucho éxito y recibió encargos en la corte de Stuttgart, en la de Mannheim y en la de Berlín en 1764. Las primeras obras de las que se tiene constancia después de su regreso a la pintura son de 1761 en el tribunal de Stuttgart del Duque Carlos Eugenio de Wurtemberg . Pintó dieciocho cuadros en un tiempo muy corto para la galería del castillo.

Retrato de Friederike Luise von Hessen-Darmstadt (1775)

En 1762 llegó a ser miembro honorario de la Academia de las Artes de Stuttgart, y trabajó en Stuttgart y Mannheim. Tres años después se instaló en París. La Real Academia francesa de Pintura y Escultura mostró su primer trabajo, la pieza titulada “El Bebedor”, aunque le rechazaron una pintura mitológica.

Fue criticada y respetada por su profesionalidad, pero no tuvo encargos. Denis Diderot, el filósofo y crítico de arte, la potenció en eso momentos encargándole un retrato con el torso desnudo, algo verdaderamente escandaloso en la época. Anna Dorothea finalmente se unió a la Academia en 1767, vivió con Diderot y conoció artistas de prestigio, pero siguió sin tener éxito en París, pese a ser su época de mayor creatividad.

París era una ciudad cara y Anna Dorothea tuvo dificultades financieras. En 1768, abandonó París con destino a Holanda, dejando deudas pendientes. Tras una breve estancia en Bruselas siguió viaje a Viena, donde la aceptaron en la Academia. Finalmente se instaló en Berlín, donde logró llegar a ser la pintora más importante de Prusia, donde se la tenía en alta estima.Nicolas de Pigage. Reader.jpg

Pintó el retrato de Federico II el Grande, y para el recién construido Palacio de Sanssouci decoró con escenas mitológicas. También pintó retratos de ocho miembros de la realeza prusiana para Catalina II de Rusia, pese a que Anna Dorothea nunca fue a Rusia, los coleccionistas rusos apreciaron su trabajo y de ahí llegó tan importantes encargos.

Nicolas de Pigage (1768)

Murió en Berlín a la edad de 61 años, y fue enterrada en el cementerio de Dorotheenstadt, pese a que iglesia fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial, su tumba quedó intacta.

Su grandísimo talento, su arrojo e inteligencia, su apasionante vida y sus grandiosas obras fueron sepultadas bajo la pesada losa del olvido. Por otra parte, su relación con Diderot inspiró a Eric-Emmanuel Schmitt para escribir su obra de teatro Der Freigeist («El Espíritu Libre»), también conocida como Der Libertin («El Libertine»).

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