Mary Stevenson Cassatt nació en Allegheny City, Pensilvania (Estados Unidos) en 1844, en 1874 viajó a Francia para completar la formación artística que ya había iniciado dibujando escayolas y copiando pinturas en una academia de orientación clásica de Filadelfia, la Academia de Bellas Artes de Pensilvania. Fascinada por el ambiente decidió establecer su estudio en París. Tres años más tarde, sus padres y su hermana Lydia se unieron a ella.
En la capital de Francia permaneció durante la mayor parte de su vida, desarrolló su carrera artística, fue una de las pocas mujeres que en su época recorrieron Europa visitando museos e iglesias para copiar a los grandes maestros y aprender de ellos. En 1872 emprendió sola un viaje de cuatro días a Madrid que acabó en una estancia de seis meses en España. Esa experiencia le abrió los ojos a una manera de pintar totalmente nueva para ella y tuvo una influencia profunda sobre su arte. Alojada en el hotel París de la Puerta del Sol se registró como copista en el Museo del Prado; trabajó sobre Velázquez, Murillo y Goya, en cuyas obras le pareció ver una bravura pictoricista incompatible con la disciplina académica que había intentado asimilar en su época de estudiante.
En el trabajo de Cassatt se combina la paleta de color y la luz mediante la pincelada suelta que caracteriza al Movimiento impresionista, esa especial sensibilidad le ayudó a establecer su éxito profesional en un momento en el que muy pocas mujeres fueron consideradas como artistas de prestigio. Su familia posó con frecuencia como modelo para sus trabajos de la última etapa, en ella se incluyen muchas imágenes de mujeres con aptitud muy moderna, ellas pueden estar en el teatro, en la ópera, en jardines y salones, pero siempre firmes y autosuficientes.
La pintura de Cassatt se especializó en escenas en interiores domésticos capturando momentos de la vida contemporánea, retratos de mujeres y representaciones de madres y niños atrapados en momentos especiales; como evocaciones de la vida interior. Fue aceptada y elogiada en el salón de 1872 y expuso su trabajo en los salones de los próximos años. Sin embargo, cuando fue rechazada tanto en 1875 como en 1877, se desencantó con la política y los valores tradicionales del mundo del arte oficial de París.
Jules secado por su madre (1900)
Por invitación de Edgar Degas en 1877 entró a formar parte del grupo de artistas independientes conocidos como Los Impresionistas. La incorporación de Cassatt representó importantes ajustes internos en un mundo al que ella misma, como mujer respetable, tenía restringido. Sus obras en ocasiones también fueron rechazadas por ser esencialmente “femeninas”, pero la mayoría de los críticos apreciaron su depurada técnica y su especial sensibilidad. A través de su visión para los negocios, sus amistades y relaciones profesionales con artistas, comerciantes y coleccionistas en ambos lados del Atlántico, Cassatt se convirtió en una figura clave en el mundo del arte de principios de siglo y ayudó a establecer el gusto por el arte Impresionista en Estados Unidos.
A los 67 años de edad, el Dr. Landoth, famoso oftalmólogo que también trató a Degas y a Monet, le diagnosticó una catarata en su ojo derecho que se complicó con la diabetes que ya padecía. Después de dos arriesgadas operaciones de dudoso resultado, su visión quedó seriamente afectada, presentado en el último postoperatorio la formación de una membrana ciclítica. Desde entonces dejó de utilizar el óleo, y comenzó a emplear más el pastel, ya que para una pintora con defectos visuales, es más fácil la técnica del pastel al no ser necesario hacer los colores en la paleta, solo es necesario aplicar las barras directamente sobre el soporte, ya sea papel o lienzo. También modificó su tradicional paleta de color, en esta etapa predominan los cálidos: ocres, rojos y marrones, probablemente se debió al filtro amarillo producido por el cristalino cuando se desarrolla una catarata. Sin embargo, la distribución espacial de sus cuadros no se vio alterada pese a su grave deficiencia ocular.
Mary siguió produciendo obra durante la década de 1910 y en sus últimos años pudo ser testigo de la aparición del Movimiento Modernista tanto en Europa, como en Estados Unidos. Sin embargo, después de su muerte y mientras el Impresionismo quedó obsoleto, un grupo de artistas con sede en Montreal (Canadá) retomaron el legado de Cassatt bajo el nombre “The Beaver Hall Group” y fue la primera asociación mixta de arte canadiense en la que las artistas desempeñaron una influencia importante y desempeñaron papeles clave. Desde entonces Mabel Mayo, Lilias Torrance Newton y Prudence Heward siguieron el ejemplo de Cassatt y trabajaron estrechamente juntas, dado que anteriormente, las mujeres que pintaban eran consideradas amateurs. La mayoría de las mujeres miembros del Grupo Beaver Hall continuaron exhibiendo tanto a nivel nacional como internacional después de la disolución del grupo en 1922..
Jules secado por su madre (1900)
Cassatt, a lo largo de su carrera, expuso su trabajo con los impresionistas en París desde 1879 en adelante y en 1886 fue incluida en la primera gran exposición de arte impresionista en los Estados Unidos, celebrada en las galerías Durand-Ruel en Nueva York.
Falleció a los 82 años y pese a todas las complicaciones de su vista no llegó a estar totalmente ciega, ya que un año antes de su muerte, aun pudo leer cartas y escribir.
Actualmente el nombre de Mary Cassatt forma parte de la historia del arte, es reconocida su importancia y su influencia en otras generaciones y es considerada como uno de los personajes más importantes del arte norteamericano.
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