Francisca Bartolozzi Sánchez, conocida como Piti o Francis Bartolozzi, nació en Madrid en 1908, hija del reconocido historietista Salvador Bartolozzi, el creador al que Gómez de la Serna se refirió como “el Toulouse-Lautrec español” dinamizador de la editorial Calleja. Fue Piti fue la mayor de tres hermanos y creció, según sus propias palabras en un ambiente de arte, rodeada de dibujantes, pinceles y lápices.

En 1921, comenzó sus estudios en el Instituto Escuela, extensión de la Institución Libre de Enseñanza, en la que impartían clases Menéndez Pidal, María de Maeztu y Victoria Kent. En 1925, se matriculó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando donde conoció al que fue su marido, el pintor Pedro Lozano de Sotés y tuvo amistad con Remedios Varo y Delhy Tejero.

Hoy es normal ver la presencia de féminas en esas aulas, pero en aquellos años era inusual, más aún en un lugar que se consideraba poco menos que un antro de perdición, hasta el punto –lo que Piti me recordaba entre risas– de que alguna compañera acudía acompañada por un sirviente de confianza.

Comenzó su actividad artística profesional colaborando en la ilustración de cuentos de la Editorial Calleja. Es la muchacha que podemos ver en el apunte que de ella hizo López-Obrero, una más de aquella avanzadilla que se desenvolvió también en el entorno del Lyceum Club Femenino, junto a Elena Fortún, Alma Tapia, Rosario Velasco… y una de las impulsoras del Primer Salón de Dibujantas, que se celebró en 1931, muchas de ellas llamadas a renovar la estética de las publicaciones de aquel bullicioso período.

Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía

Depósito temporal familia Lozano Bartolozzi, 2012

Entre 1934 y 1937 publicó para la revista Crónica la serie Canito y su gata Peladilla que tuvo mucho éxito, por lo que su nombre empezó a ser conocido. Junto a su pareja realizó trabajos escenográficos para el Teatro Español o el de Mérida y para las Misiones Pedagógicas que, al calor de la República, creó Manuel B. Cossío para llevar la educación total a los remotos pueblos de España.

Durante la Guerra Civil realizó trabajos para el Altavoz del Frente, una organización dependiente del Ministerio de Prensa y Propaganda de la República, en las que llevó a cabo distintas tareas de difusión artística: carteles, ilustraciones, cuentos, cosió y pintó muñecas de trapo…  también un gran número de dibujos de carácter privado que reflejan el ambiente y los tipos propios de la retaguardia: milicianos, exiliados, filas de racionamiento… y tremendas pesadillas infantiles ante los bombardeos. Posteriormente, la pareja se trasladó a Valencia donde grabó los aguafuertes “Pesadillas infantiles” para el Pabellón Español de la Exposición Universal de París de 1937, que se expusieron en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en 1987. Precisamente el Museo Reina Sofía atesora un juego de los grabados y los bocetos de soldados republicanos, y también una notable representación de sus ilustraciones.

Cuando el fin de la contienda fue ya inminente, Piti estaba embarazada y tras destruir muchas de sus obras, huyó hacia Pamplona, buscando el cobijo de la familia de Pedro, después continuó dibujando pero con la firma de su marido. En esa ciudad permaneció y fijo su residencia definitivamente y fue castigada doblemente, por ser una mujer libre y por ser republicana, a un duro y silencioso exilio interior.

Serie: Pesadillas infantiles (1937)

Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía

En los siguientes años trabajó compaginando sus tareas familiares y la crianza de sus cuatro hijos con la docencia, la pintura mural, el cómic, la ilustración, la escritura y la escenografía. Sus personajes Capitán Trompeta y el Marino Trompetín, protagonistas de tiras cómicas, pasaron a ser personajes de teatro en obras estrenadas en Madrid en el Teatro Infanta Isabel.

Como escritora de cuentos infantiles publicó en revistas como Bazar y Teresa. En su faceta de ilustradora dibujó cuentos de diversos autores, y con textos de Aurora Medina realizó libros sobre temas pedagógicos. Con el fin de la dictadura pudo mostrar su vena creativa de manera más libre y sin las cortapisas que imponía la censura social o política.

En 1996, expuso en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona y en el Deutsches Historisches Museum de Berlín. Hasta el 22 de septiembre del 2019 se encuentras expuestos algunos de sus dibujos en la exposición «Dibujantas» en el Museo ABC comisariado por Josefina Alix y Marta Orbegozo. Una muestra cuyo título hace referencia al aclamado I Salón de Dibujantas que tuvo lugar en el Lyceum Club Femenino en 1931, reúne en una exposición las obras de las principales ilustradoras que trabajaron para Blanco y Negro y ABC desde 1891 hasta finales de los años noventa del siglo XX. Resultado de imagen de piti bartolozzi

Dibujantas pretende, por un lado, dar luz sobre la trayectoria y vida de todas las artistas seleccionadas, mostrando sus obras al público y sirviendo como punto de partida para líneas de investigación futuras que resalten la valiosa aportación de todas ellas al mundo de la ilustración

 

https://www.abc.es/cultura/cultural/abci-piti-bartolozzi-levedad-fantasia-201612080134_noticia.html

https://museo.abc.es/exposiciones/2019/05/dibujantas/1712896

https://es.wikipedia.org/wiki/Francisca_Bartolozzi