Nieves Correa (en primera persona)

Nací en una familia recompuesta, cual monstruo de Frankenstein, sobre los restos del naufragio de nuestra guerra civil y su posguerra; en Madrid en 1960. Y pasé gran parte de mi infancia, por la misma razón, en Ginebra, ¡¡afortunadamente!!.

Desde que tengo recuerdo y consciencia quería ser artista visual y la verdad es que poco tenia a mi favor: una familia mas que humilde y una menos que discreta facilidad para el dibujo y el color. Las dos dimensiones, omnipresentes en el arte entonces, nunca se me dieron bien.

No estudié Bellas Artes, conscientemente y después de una formación no reglada, decidí estudiar Historia del Arte. Me interesaba mas la teoría que la práctica, la práctica que ofrecía nuestra facultad de Bellas Artes en Madrid en aquel entonces; y compaginando siempre el trabajo por la mañana con el estudio por la tarde.

No obstante tuve la suerte de formarme con Concha Jerez, Antoni Muntadas, Frances Torres, Soledad Sevilla, Isidoro Valcarcel Medina e Iam Wallance en los Talleres de Arte Actual del Círculo de Bellas Artes de Madrid a finales de los años ochenta y principios de los noventa mientras a nuestro alrededor se desplegaba el decorado de cartón piedra de nuestra transición hacia el olvido, un olvido no solo político sino también cultural. Un decorado que inventaba nuevos y fantásticos personajes mientras relegaba al olvido a la mayor, y mas interesante parte, de nuestra historia del arte actual.

Performance

«Días de vino y rosas»

También entonces pase temporadas en Holanda, entre Arnhem y Maastrich que me descubrieron no sólo otras posibilidades de creación sino también de autogestión: la posibilidad de crear los canales, la teoría y la práctica que las instituciones nos estaban negando en aquel momento y desde principios de los años noventa comencé a organizar festivales y encuentros fundamentalmente de arte de acción.

A esta experiencia de autogestión nos unimos compañeras y compañeros de todo el estado que creamos una red de distribución y reflexión durante los primeros noventa que a finales de la década se extendió hacia Europa. Esta fue una experiencia común ética y política basada en la necesidad de hacernos oír en un contexto donde todos parecían sordos, donde nada más allá de la propaganda política (la cultura también es propaganda política) parecía transcender.

A principios del 2000, quizás por el hecho de ser madre entonces, y por un lado tener más consciencia de las circunstancias socio-fami-laborales de la mujer y por el hecho de tener mucho, pero mucho menos tiempo me vuelco en la acción y en una acción que habla de mí y por ende de todas. El tiempo, el paso del tiempo, el cuerpo, la maternidad, el dolor, ….

 

Performance

«Todo lo sólido se desvanece»

Ahora o me interesa fundamentalmente la idea de tiempo, pero de un tiempo vital y mental, de un tiempo que se va haciendo cada vez más difuso, más lejano a la idea tradicional de una flecha que transcurre y más cercano a la idea de los tiempos superpuestos y las historias múltiples y reescritas, como la que nos corresponde y la acción, aunque componente fundamental de todo mi trabajo, genera también objetos, fotografías, videos, instalaciones…

Entre finales de los setenta y principios de los ochenta tomé parte muy activa en el movimiento feminista y en su lucha por reivindicar nuestro derecho a decidir sobre nuestro cuerpo y la maternidad, los anticonceptivos no se despenalizaron hasta finales de 1978 y aun así no era fácil acceder a ellos. Y esa fue una etapa muy importante para mí porque estuve trabajando estrechamente con mujeres, las mayoría bastante más mayores que yo y con una gran historia de lucha feminista y antifranquista a sus espaldas.

Resultado de imagen de nieves correa

Performance: Biografía 10.3

Sobre lAcción!MAD, el festival que organizo desde el año 2003, cada año tiene al menos (la mayoría muchas más) un 50% de mujeres en su programación. También poco a poco la idea de festival (algo que pasa como un explosión) y que para mí tiene que ver con una sociedad espectacular y patriarcal, la sociedad del epatar, se va diluyendo en proyectos que tienen que ver más con la experiencia en el tiempo y en las relaciones humanas y ponemos más énfasis en las residencias que llevan a la convivencia entre los artistas, en la mayoría de los casos mujeres pero no siempre.

Enlaces:

http://Freijo Gallery

http://re-act-feminism – a performance archive

http://ELAA – European Live Art Archive

http://The Window – entrevista con Nieves Correa

http://Acción!MAD – Encuentros Internacionales de Arte de Acción

http://Facebook

http://Las que habitan la cultura – cultura y mujer en CyL

http://Instagram

http://Archivo virtual de las Artes Escénicas